Tenéis que hacer un bizcocho, el que mas os guste; cortarlo en 3 o cuatro partes.
Cada rueda de bizcocho la "almibamos" bien y rellenamos con crema pastelera (podéis poner el relleno que prefieras).
Una vez montada la tarta la cubrimos con la crema del relleno que nos hará de pegamento para que los piñones se peguen.
Ponemos los piñones y cuando todos estén bien colocaditos le ponemos por encima con un pincel gelatina o un glaseado de agua y azúcar.
Y así queda:
La rosa la hice de fondant.